Larrazabalek hezkuntza eragileak eztabaidatik kanpo utzi izana salatu du eta PSEri, EAJri eta PPri euskal gizarte osoa susmopean jartzea egotzi die, ETAren konplizea izan balitz bezala.
Jesús Mari Larrazabal reitera el rechazo de Eusko Alkartasuna al Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia consensuado finalmente en cierto modo por el PNV con el Gobierno del PSE, con el apoyo del PP, porque los cambios introducidos por los jeltzales en la propuesta original del Ejecutivo “son muy insuficientes, ya que el plan sigue siendo parcial, discriminatorio e injusto”. El portavoz de EA en el Parlamento rechaza asimismo el procedimiento seguido en la elaboración del documento final. Al respecto acusa “a unos y otros de haber excluido del debate a toda la comunidad educativa, pese a ser la destinataria principal del plan, y también a los grupos políticos; hasta hoy mismo no he tenido conocimiento oficial del texto pactado, después de haber conocido su contenido a través de la prensa. Es un desprecio absoluto tanto a los agentes educativos como al propio Parlamento como institución”.
En cuanto a los contenidos del Plan, Larrazabal aprecia prácticamente los mismos defectos y carencias que ya hizo patentes en sus alegaciones del mes de abril. “Es cierto que ahora se reconoce expresamente la autonomía de los centros escolares a la hora de decidir la aplicación práctica y concreta de las medidas recogidas en el plan, y eso es positivo, pero la esencia del documento sigue siendo errónea desde su primera página porque se plantea como un elemento más de la lucha antiterrorista”, denuncia.
El parlamentario de EA critica que el Plan sólo tenga en cuenta a unas víctimas, las de ETA, lo cual “es discriminatorio e injusto porque supone establecer diferentes categorías de víctimas, e incluso negar en determinados casos la propia condición de víctima”. Además, acusa al PSE, al PNV y al PP de “dar por buena una tesis que es muy grave y que se repite con insistencia a lo largo de todo el documento, la idea de que es necesario un cambio de actitud de la sociedad vasca ante el terrorismo”. A juicio de Larrazabal, “esa tesis pone al conjunto de la sociedad vasca bajo sospecha, como si hubiera sido cómplice de ETA, y eso es inaceptable”.
Asimismo, el parlamentario de EA echa en falta una justificación de los cambios introducidos en las medidas que ya habían sido recogidas en el Plan de Educación para la Paz y los Derechos Humanos del anterior Gobierno tripartito. En este sentido, constata que “la gran mayoría de las acciones previstas en el anterior plan han sido reformuladas o suprimidas sin que aparezcan por ningún lado las razones que justifican esa decisión, lo cual lleva a pensar en que los motivos son arbitrarios y partidistas”.
Jatorria: Eusko Alkartasuna
