Joseba Azkarraga (Consejero de Justicia del Gobierno Vasco)

Son nuestros jueces, quienes desarrollan un servicio público de vital
importancia para la sociedad y ellos constituyen un elemento fundamental en
la organización de todo el poder judicial de una sociedad democrática.

Considero acciones retorcidas e interesadas, las continuas especulaciones y
comentarios difamatorios, tanto desde ciertas formaciones políticas como
desde algún medio de comunicación, que quieren presentar al País
Vasco como una zona poco grata para el destino profesional de los jueces, aunque
en ocasiones se nos presentan algunas situaciones difíciles.
 
Me parece una contradicción
que desde el Consejero General del Poder Judicial se diga que las plazas vacantes
de jueces en la Comunidad Autónoma se quieran cubrir con ciertos tramos
de la lista de opositores.
 
En una oposición,
todos sus componentes merecen igual respeto. Con ese mismo respeto profesional
que también debemos a los componentes del CGPJ cabe preguntarse qué
clase de oposición han tenido que superar los componentes de esa institución
-el Consejo General del Poder Judicial- para acceder a la misma si no es la
adscripción o proximidad a determinadas fuerzas políticas, incluido
su presidente. Algo que no ocurre en el caso de nuestros jueces quienes sí
han tenido que superar unas duras pruebas profesionales para llegar a sus plazas.
 
Todas las informaciones
y comentarios interesados sobre como se cubren plazas vacantes de jueces -no
solo aquí también en otras comunidades- nada benefician al objetivo
de una administración de Justicia independiente, moderna y ágil.
Nuestros jueces son unos profesionales que se merecen el mayor respeto ya que
desarrollan un importante papel en la vida de nuestra sociedad.
 
Flaco favor les
están haciendo desde Madrid y desde determinadas opiniones políticas
que se atribuyen su representación y no dudan en enredar siniestramente
situaciones y opiniones.
 
Afortunadamente,
la sociedad sabe distinguir y reiterará, cuantas veces haga, falta todo
nuestro cariño a este colectivo profesional.

Jatorria: Eusko Alkartasuna