Creemos que la Autoridad Vasca de la Competencia (AVC) constata una actuación ilícita de determinadas empresas, que se prolongó durante muchos años. Siendo esto así, consideramos razonable la decisión de la AVC, respetando, por supuesto, las acciones que puedan emprender las empresas sancionadas para ejercer su derecho a la defensa.

Mientras EA dirigió la cartera de Educación en el Gobierno vasco, la contratación del servicio de catering de los comedores escolares públicos siempre se hizo conforme a lo que establecía la legalidad, igual que en todas las demás contrataciones del Departamento. Ahora bien, el caso que ahora ha sacado a la luz la AVC pone de manifiesto que, probablemente, habrían sido necesarios mayores y mejores mecanismos de control que hubieran hecho imposibles prácticas como las que ahora se han sancionado.

La resolución de la AVC es un elemento más que viene a ratificar la necesidad de cambiar el modelo de gestión de los comedores escolares, en la dirección que ya propuso EH Bildu en el Parlamento hace ahora justo tres años y que fue rechazada por el resto de grupos.

Creemos que es hora de apostar por un modelo diferente que reconozca la autonomía de los centros educativos y posibilite su participación directa en el diseño, gestión, control y seguimiento de su servicio de comedor, de modo que se facilite la participación de los productores locales y del pequeño comercio. Creemos que de esta manera quedaría plenamente garantizada la calidad del servicio y la correcta alimentación de nuestras hijas e hijos.