El candidato de Eusko Alkartasuna por Bizkaia al Parlamento de Gasteiz, Marcos Cucó, afirmó ayer durante un acto electoral celebrado en Santurtzi, que hay “mucho en juego” en la cita electoral del domingo 17 de abril, tanto como “la capacidad para decidir y escribir nuestro futuro, como nos corresponde como pueblo”. Cucó reafirmó el claro compromiso de la coalición para que en esta legislatura sea la sociedad vasca quien decida su futuro en clave de no violencia avanzando hacia la soberanía y el desarrollo de los derechos sociales de la ciudadanía.

Tras manifestar su rebeldía contra la injusticia, en forma de cualquier expresión de violencia, precariedad laboral o exclusión social, o “cuando se quiere acallar la voz de un pueblo”, Cucó reivindicó la labor transformadora de la política para cambiar la sociedad de raíz, siempre bajo la máxima de servir a los ciudadanos. En este sentido, abogó por trabajar en pro un modelo de sociedad republicano, progresista, de justicia social y solidario.

“Somos una nación”, señaló, por lo que consideró “lógico y natural” que los pueblos que cuentan tienen conciencia nacional de sí mismos quieran estructurarse políticamente, lo que “no nos hace ni mejores ni peores que nadie, pues sólo estamos reclamando lo que nos corresponde como pueblo y que sistemáticamente se nos está negando desde Madrid y París, y también desde algunas formaciones políticas de aquí”.

A este respecto, el candidato, y también concejal de Muskiz y miembro de la Ejecutiva Regional de Eusko Alkartasuna, denunció entre aplausos de la concurrencia la marginación de la mayoría nacionalista en muchos ayuntamientos debido a los pactos de gobierno entre el PSOE y el PP. Al hilo de esta cuestión responsabilizó a ambas formaciones de que muchos jóvenes se ven forzados a abandonar sus localidades de origen debido a que en los pueblos donde gobiernan “no se está posibilitando el acceso a una vivienda”, y puso como ejemplo que durante los últimos seis años en Santurtzi no se ha construido ninguna vivienda de protección oficial.

Fuente: Markos Cucó