El secretario de Organización subraya que la apuesta de EA por la soberanía es permanente, no caduca en 2009 como parece plantear Imaz El secretario de Organización de Eusko Alkartasuna, Rafael Larreina, insta al presidente del PNV, Josu Jon Imaz, a que respete a la afiliación y a la dirección de EA y que en adelante se abstenga de acusar a esta formación de haber actuado con deslealtad en la constitución de los nuevos ayuntamientos. Según Larreina, esa acusación es inadmisible porque se basa además en falsedades, como que EA ha intentado quitar 12 alcaldías al PNV, algo que, en cambio, me consta que el PNV sí ha tratado de hacer en municipios donde EA ha sido la lista más votada.
El dirigente abertzale subraya asimismo que de igual manera que Imaz ha puesto el grito en el cielo por lo ocurrido en Zumaia o Muskiz, en EA podríamos haber hecho lo mismo al ver que el PNV permite en Sopuerta que haya un alcalde comprometido con el franquismo sólo por no dar sus votos al candidato de EA mientras que en Laguardia EA posibilitaba con su voto que haya una alcaldesa abertzale del PNV. O al comprobar que en ningún municipio donde EA ha sido la fuerza más votada hemos recibido los votos peneuvistas para alcanzar las alcaldías; por el contrario, en ocho pueblos hay alcaldes del PNV gracias a nuestros votos.
Excepciones como las de Zumaia o Muskiz simplemente demuestran que a veces los criterios generales de partido tienen dificultades de aplicación en determinados municipios por su propia idiosincrasia y deberían servir, en vez de para lanzar acusaciones sin fundamento, para que el PNV haga autocrítica y se pregunte por qué en esos lugares es incapaz de aglutinar mayorías estables de gobierno y por qué la mayoría municipal se une democráticamente para que no siga en la Alcaldía.
Para Larreina, es igualmente inadmisible intentar trasladar a la sociedad vasca el mensaje de una supuesta deslealtad de EA con el Gobierno Vasco cuando precisamente han sido EA y su presidenta, Begoña Errazti, quienes una y mil veces han reiterado su compromiso con el tripartito mientras Imaz especulaba públicamente con posibles pactos con el PP. Como inadmisible resulta tratar de buscar la discrepancia dentro de EA en vez de mirar dentro de su propia casa.
El secretario de Organización de EA cree que Imaz comete un error estratégico de calado al contemplar la opción del tripartito como una simple fórmula matemática de gobierno que sólo sirve si permite gobernar en ayuntamientos o diputaciones. Para EA, en cambio, la importancia del tripartito va mucho más lejos, es el cauce central de la sociedad vasca y su valor radica en su compromiso con los derechos humanos y con el derecho a decidir de Euskal Herria. En este sentido, ha añadido Larreina, en EA tenemos muy claro que nuestra apuesta por la soberanía es permanente, no caduca en 2009 como parece plantear Imaz.
A juicio del dirigente de EA, una parte del PNV ha sobredimensionado la relevancia de esta polémica porque en el fondo quizá sólo buscan una excusa que justifique lo que llevan tiempo deseando en la sombra: el fin del tripartito, la sustitución de Ibarretxe y la vuelta a la era Ardanza, al autonomismo y los pactos con quien gobierne en Madrid.
Fuente: Rafael Larreina