Espera que ETA dé «señales inequívocas de que va a hacer algo que permita pensar en el fin del conflicto» Confía en que «el PP cambie su postura y no se quede fuera» La presidenta de Eusko Alkartasuna, Begoña Errazti, afirmó ayer que 2006 será el año en que será posible alcanzar «un punto de inflexión» hacia la paz y la normalización política. Errazti abogó por profundizar en el diálogo para dar solución al conflicto vasco. «Por un lado, sobre la existencia de ETA y por otro, sobre lo que tiene que ver con la normalización política, entendida como derechos del pueblo vasco», incidió.

La dirigente de EA compareció ante los medios de comunicación para hacer un balance político del año que termina y que, a su juicio, ha estado marcado por las expectativas de apertura de un proceso de pacificación y de normalización política. Errazti avanzó que «EA va a poner todos los esfuerzos posibles para que 2006 sea realmente el punto de inflexión que no tenga vuelta atrás, y sea el año en el que culmine un proceso de paz».

Confió en que el Partido Popular cambie su postura y no se quede fuera, y que «ETA dé señales inequívocas de que va a hacer algo que permita a los partidos políticos pensar en llegar al fin del conflicto político vasco». Asimismo, Errazti exigió al Gobierno de Rodríguez Zapatero «que cumpla con lealtad las promesas que hizo a los ciudadanos vascos a quienes pidió el voto el pasado 17 de abril».

También se refirió a los denominados «macrosumarios», como el 18/98, que según advirtió, «vulneran derechos de ciudadanos vascos que hacen perder la credibilidad de la justicia y que contradicen los avances que se están dando en el ámbito de lo político».

A juicio de Errazti «no se puede estar hablando de compromisos en el ámbito de la paz y luego mantener estos macrosumarios». En este sentido, la presidenta de EA reclamó la apertura de un proceso de normalización «en el sentido más global y total de la palabra, al que se enfrenten en igualdad de condiciones todos los partidos, para abordar una negociación que resuelva definitivamente el llamado conflicto político vasco».

Intereses partidistas

Apuntó que «sería un grave error que por intereses partidistas y por pretensiones de controlar este debate se malograra este proceso intentando perpetuar de una manera indefinida la situación actual».

Errazti consideró, asimismo, que «la pacificación y normalización política sólo pueden llegar si se va a las causas de la falta de paz y de normalización y ese es el reto que tenemos los partidos para el 2006».
Fuente: Begoña Errazti