EA presentó hoy en el Parlamento Foral una proposición de ley
de Desarrollo Rural de Navarra en la que se recogen varias iniciativas orientadas
al impulso económico, social y medioambiental de unas zonas en las que
vive el sesenta por ciento de la población navarra.

La presidenta de EA, Begoña Errazti, calificó en conferencia de
prensa las zonas rurales de Navarra como ‘desfavorecidas’ en el conjunto
de la Comunidad Foral, ya que en ellas, según dijo, se está produciendo
una disminución de equipamientos y servicios que provoca la despoblación
de estas áreas.

Errazti consideró por ello que el desarrollo rural debe ser un ‘objetivo
prioritario’ de la intervención pública con el fin de avanzar
en la competitividad de estas zonas desde el punto de vista económico,
social y medioambiental.

En primer lugar, especifica la proposición, debe lograrse una competitividad
económica proporcionando alimentos saludables y de calidad y una mayor
diversificación e intersectorialidad de la producción agraria
junto a una valorización de la producción en el medio rural en
general.
Además,
se apuesta por una competitividad social, mejorando el acceso de la población
rural a niveles de calidad de vida similares al resto de la sociedad, y por
una competitividad ambiental, fomentando la protección, mejora y enriquecimiento
del patrimonio natural y cultural de las zonas rurales.

En este sentido, Errazti abogó por impulsar en las áreas rurales
de Navarra el desarrollo de equipamientos que mejoren la calidad de vida de
sus habitantes en relación a la enseñanza, la sanidad o la vivienda,
para lo que debería hacerse una ‘discriminación positiva’
de estas zonas.

Entre otras medidas, la proposición de ley regula la redacción
de un Plan Plurianual de Desarrollo Rural de Navarra para delimitar las diferentes
‘Zonas rurales de actuación’ y diseñar para cada una
de ellas un diagnóstico de situación y después programas
específicos y coordinados de desarrollo.

Este plan sería aprobado por el Parlamento de Navarra previa presentación
de una propuesta por parte del Consejo Navarro de Desarrollo Rural, un órgano
de nueva creación dedicado al asesoramiento, análisis, planificación
y evaluación en esta materia que estaría compuesto por miembros
del Gobierno de Navarra y de las agrupaciones locales para el desarrollo rural.

Otro de los aspectos
novedosos de la proposición de ley es que las Administraciones de Navarra
deberían reservar en el presupuesto de las obras públicas por
importe de más de 300.000 euros una partida equivalente, como mínimo,
al uno por ciento del presupuesto para invertirlo en políticas de desarrollo
socio-económico de la zona de influencia de esa infraestructura.
Fuente: Eusko Alkartasuna