EA reitera su oposición al Plan de Convivencia Democrática porque “ha dejado de ser un plan de educación para la paz”. Denuncia “el desprecio del Gobierno a los agentes educativos” y les insta a “hacer valer la autonomía de los centros de enseñanza para evitar la aplicación del plan”. Dice que López debería pedir perdón a la sociedad vasca porque su plan insinúa que ésta ha mostrado connivencia con ETA.

Con motivo de la presentación del Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia en el Parlamento Vasco, Eusko Alkartasuna reitera su más firme oposición al mismo porque ha dejado de ser un plan de educación para la paz y los derechos humanos, tal y como Jesús Mari Larrazabal viene denunciando en las últimas semanas. El portavoz de EA en la Cámara no ha podido participar hoy en el debate porque está de baja médica desde que el pasado jueves tuviera que abandonar el Pleno por una dolencia de tipo cardiaco.

A juicio de EA, el Gobierno vasco ha planteado desde el primer momento su Plan de Convivencia como un instrumento más de la lucha antiterrorista, lo que es claramente un planteamiento erróneo y viciado en origen. Por ello, la formación independentista acusa al lehendakari de cometer la irresponsabilidad de confundir la educación con la política antiterrorista. En este sentido denuncia que, a pesar de estar pensado para la escuela, el plan tiene el sello del Departamento de Interior y no ha sido objeto de debate y discusión con la comunidad educativa. EA acusa por ello al Ejecutivo de haber excluido y despreciado a los agentes educativos, e insta a éstos a hacer valer la autonomía de los centros de enseñanza para evitar la aplicación del plan.

EA rechaza el carácter unilateral e unidireccional del plan, puesto que para el Gobierno sólo existen las víctimas de ETA, algo que resulta parcial, discriminatorio e injusto en un país que por desgracia ha conocido y conoce violencias ajenas a ETA. Especialmente grave es, además, la apelación permanente del plan a la sociedad vasca para que cambie su actitud ante el terrorismo. Para EA, detrás de esa llamada a la ciudadanía se esconde una tesis intolerable que comparten el PSE y el PP, la idea de que en el pasado los ciudadanos y ciudadanas vascas han mostrado connivencia con ETA, que de algún modo han sido cómplices del terrorismo. Lo que tiene que hacer el lehendakari es pedir perdón a la sociedad vasca porque sólo insinuar tamaña barbaridad es un insulto inaceptable.

Fuente: Eusko Alkartasuna