Dirigentes de Eusko Alkartasuna se han reunido en ´las últimas horas´ con representantes parlamentarios de Batasuna para analizar la situación política generada tras la suspensión de sus actividades dictada por el juez Baltasar Garzón.

Fuentes de EA explicaron que han mantenido conversaciones con Batasuna ´antes´ del auto, ´en estos momentos y en el futuro´, pero advirtieron de que, a pesar de los encuentros, ´no existen relaciones normalizadas con esta formación´.

Refiriéndose a esta reunión, el consejero de Justicia del Gobierno Vasco, Joseba Azkarraga, dijo hoy que Batasuna es, en parte, ´responsable de su ilegalización´, puesto que, ´la actual situación también es fruto de una actuación determinada y de un silencio´, y explicaron que, esta forma de actuar de Batasuna ´hace muy difícil que haya una relación normalizada con sus actuales miembros´.

No obstante, aclaró que EA tiene ´las puertas abiertas´ a este tipo de relaciones para analizar la situación política, porque ´es absolutamente normal que existan´, aunque ´sea muy difícil que haya puntos de encuentro´.

´Al final, quiera o no el señor Garzón o el señor Aznar, ese colectivo representa un número importante de ciudadanos de este país que no podemos dejar de lado´, incidió el consejero. El secretario de Organización de EA, Rafael Larreina, reconoció la existencia de estos contactos, que situó en las relaciones que su partido tiene con todas las formaciones políticas que quieren tenerlos, es decir, ´todos excepto el PP´.

En relación con el anuncio del presidente del Gobierno, José María Aznar, de que la ilegalización no supondrá el final del terrorismo y que ETA seguirá con los atentados, Azkarraga opinó que ´es la demostración del fracaso de una política que ha llevado al fortalecimiento de los núcleos más duros de ETA´.

´Indudablemente es el reconocimiento de que la ilegalización de Batasuna no persigue solamente el fin de ETA, sino que, entre otras cosas, es un ataque al conjunto de la democracia y también del nacionalismo democrático´, criticó.

Asimismo, reprochó a Aznar que diga ahora que ´ningún dirigente sensato puede poner plazos para acabar con ETA´ y le recordó que cuando llegó al Gobierno ´puso de plazo una legislatura para terminar con el terrorismo´.

Finalmente, el consejero vasco señaló que las declaraciones del presidente en Quintanilla del Onésimo suponen ´una contradicción´, ya que, ´han estado vendiendo de manera continuada que la ilegalización de Batasuna suponía el fin de ETA´.

Fuente: Eusko Alkartasuna