Seguramente a muchas personas les parecerá una cuestión sin importancia el hecho de que Confebask haya decidido no invitar a EH Bildu al acto de homenaje a empresarios vascos víctimas de ETA, pero a Eusko Alkartasuna no se lo parece, porque el argumento de Confebask para justificar esa decisión ha sido que “no es el momento, hay que respetar el tiempo de las víctimas”.
Vaya por delante que como secretario general de Eusko Alkartasuna me siento orgulloso de haber estado siempre apoyando a los y las empresarias que durante años sufrieron las acciones de ETA, de la misma manera que nos hemos puesto del lado de todas las víctimas, independientemente del origen de la violencia.
Pues bien, al parecer no hemos demostrado respaldar suficientemente a las víctimas, porque también se nos ha denegado la invitación al acto. No nos preocupa no haberla recibido, ya que no necesitamos que nadie avale la trayectoria de EA en materia de defensa de los derechos humanos, pero sí nos preocupa que sea Confebask la que se arrogue el derecho a decidir los tiempos de las víctimas.
EH Bildu nació hace seis años con el objetivo, entre otros, de conseguir la paz y la convivencia en Euskal Herria, y en ello estamos. Tanto EH Bildu como los partidos que lo conformamos tenemos muy claro que los tiempos de las víctimas hay que respetarlos, y por eso la discreción ha sido la característica principal en este tema. Solo hay que echar un vistazo a la hemeroteca para comprobar cómo se han ido gestionando homenajes a distintas víctimas; con paciencia, trabajo de cocina y pequeños pasos. Sabiendo en todo momento que EH Bildu estará allí donde pueda ayudar a la convivencia pero no estará si no lo puede hacer. Y en ese trabajo también EA ha jugado un papel responsable.
Porque de eso se trata, de actuar con altura de miras y responsabilidad, y para eso hay que estar dispuesto a trabajar con discreción, tendiendo puentes y asumiendo que hay que dar pasos incómodos, pero necesarios para la convivencia.
Lo contrario es, desde nuestro punto de vista, ahondar en las trincheras como las que el PP se esfuerza en mantener, y a la vista de las formas elegidas por Confebask para gestionar el asunto, nos preguntamos si ése ha sido el objetivo.
Tanto por parte de EA como de EH Bildu entendemos que todos los agentes políticos, económicos y sociales vascos son necesarios para que la convivencia sea una realidad, y esperamos que también así lo piense Confebask. De hecho, en el pasado nos hemos sentado en diversas ocasiones para tratar varios temas y en el futuro vamos a tener que sentarnos otras muchas veces. Algunas llegaremos a acuerdos y otras no, pero la puerta del diálogo nunca ha de cerrarse.
Hay militantes de EA que son miembros de Confebask, o empresarias y empresarios que han vivido en sus carnes las amenazas y actos de ETA. Y por encima de ello, o gracias a ello quizá, sabemos lo generoso que es trabajar por la convivencia. Seguimos en ello, y desde Eusko Alkartasuna tendemos la mano a Confebask, para que, desde su ámbito, sigan trabajando en favor de la convivencia desde la valentía, la honestidad y la generosidad. La convivencia lo merece.
Pello Urizar Karetxe
Secretario general de Eusko Alkartasuna