Agur eta ohore, gudari zaharra, lagun ahaztezina!
Mañana se cumple el centenario del nacimiento de Joseba Elosegi, gran persona y referente abertzale, con quien tuvimos el honor de compartir militancia en Eusko Alkartasuna.
Joseba Elosegi, nacido en 1915, vivió todos los episodios de la historia del siglo XX de este país: la guerra del 36, siendo testigo directo del bombardeo de Gernika y condenado a muerte; la dictadura, que combatió dispuesto a dar su vida por la causa de su pueblo; el exilio; la llamada transición, que se basó en negar lo vivido por su generación y los derechos de Euskal Herria. Y vivió todas esas etapas intensamente y sin renunciar a la lucha por los derechos de Euskal Herria, aun en los tiempos de mayor represión.
Joseba Elosegi encarnaba los principios fundamentales de Eusko Alkartasuna aun antes de que el partido naciese, así se demuestra cuando ya en los años 70 decía que independencia y justicia social eran las bases de su pensamiento ideológico. Sin olvidar el pacifismo de un hombre obligado por las circunstancias y siendo muy joven a participar en una guerra; el pacifismo de quien estuvo dispuesto a dar su vida por la causa de su pueblo –así lo demostró quemándose a lo bonzo ante el Franco- pero no a matar, ni siquiera al dictador, como él mismo explicó.
Hoy, 100 años después de su nacimiento, reivindicamos a Joseba Elosegi el compañero de militancia, el mítico luchador antifranquista capaz de llevar un poco de ilusión a una sociedad subyugada poniendo una ikurriña en el Buen Pastor donostiarra, el viejo gudari que reivindicó la dignidad de los perdedores de la guerra recuperando la ikurriña de su batallón del Museo del Ejército, el militante abertzale compañero del lehendakari Garaikoetxea en los difíciles años del postfranquismo.
Hoy, cien años después de su nacimiento, Joseba Elosegi sigue siendo inspiración para quienes formamos parte de Eusko Alkartasuna. Agur eta ohore, gudari zaharra, lagun ahaztezina!
