Esta es una de las principales causas que según organismos internacionales y asociaciones humanitarias propician estos delitos La portavoz de Eusko Alkartasuna en el Congreso, Begoña Lasagabaster, ha pedido al Gobierno que aborde cuanto antes la reforma de la actual regulación del régimen de incomunicación. Petición realizada por la diputada de la formación abertzale a través de una pregunta oral al ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, durante la habitual sesión de control al Gobierno. Como ha explicado Lasagabaster, tal reforma consistiría en la supresión de los artículos 509, 520 bis y 527 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que establecen un período de incomunicación para los detenidos y presos preventivos en determinados supuestos de terrorismo de hasta 13 días y deniega el derecho a ser asistido por un abogado de libre elección y a ser examinado por un médico de su confianza.

Lasagabaster ha recordado que desde hace 15 años, “destacados organismos internacionales como el Comité de Derechos Humanos, el Consejo de Europa, Amnistía Internacional o Human Rigths Watch o el actual Relator de Derechos Humanos de Naciones Unidas Theo Van Boven, han manifestado literalmente que “el régimen de incomunicación facilita la tortura”.

También se ha referido Begoña Lasagabaster a la opinión expresada por el Tribunal Constitucional que “siempre ha considerado que ampliar la detención preventiva podía suponer una penosidad adicional y que excepcionalmente solo se puede realizar bajo la base de dos principios clave, que sea de necesidad estricta y que la incomunicación sea de la mayor brevedad posible”

Esta pregunta oral, como ha señalado la portavoz de EA, es una cuestión en la que la formación abertzale viene insistiendo durante muchos años y con “la que no coinciden con el Partido Socialista en cuanto a la supresión, pero ´sí en la necesidad de establecer mayores garantías”.

Así lo ha confirmado el titular de Justicia, Juan Fernando López Aguilar que ha respondido a la portavoz de EA que “tienen previsto proceder a la reducción del período de incomunicación, pero no está entre sus planes suprimirlo”.

Fuente: Begoña Lasagabaster