El portavoz de EA en las Juntas Generales de Araba confía en la receptividad de su socio, el PNV, pero advierte de que podrían abstenerse en el presupuesto foral.

EA ha visto desde la barrera cómo el tripartito foral al que pertenía junto al PNV y Aralar saltó el pasado viernes por los aires después de que en un consejo extraordinario, el diputado general, Xabier Agirre, cesara a Javier Aspuru, responsable foral de Juventud y Promoción Social, por abstenerse en el proyecto de presupuestos de 2010. Lauren Uria, portavoz de EA en las Juntas, considera la decisión «inorportuna» y «precipitada», porque en su opinión había que haber esperado al pleno que se celebrará el 21 de diciembre. ¿Se abstendrá EA? De momento, ya ha votado que sí por «lealtad con el electorado nacionalista», pero advierte de que «podría abstenerse» si el PNV no es receptivo con sus enmiendas a las cuentas.
-En su calidad de socio en el Gobierno foral, ¿estaba al tanto de la más que probable abstención de Aralar en la votación del presupuesto y el posterior cese de Aspuru?
-No estábamos al tanto de que podría tener tanto alcance. Pero sí es cierto que a lo largo de la legislatura ha habido, en el ámbito de la fiscalidad, posturas dispares en el tripartito.
-¿También entre EA y el PNV?
-Sí. Me refiero, por ejemplo, a la eliminación del Impuesto de Patrimonio, a los tipos del de Sociedades o a la deducción de los 400 euros, donde no se hizo gala de nuestra soberanía fiscal y se adoptó una decisión errónea y vinculada a la campaña del PSOE.
-¿Les sorprendió el cese?
-Sí, y tenemos que decir que nos pareció inoportuno. Había que agotar todas las posibilidades de mantener la apuesta y el compromiso inicial de tener un gobierno nacionalista en Álava tras ocho años del PP. Fue precipitado. Lo oportuno hubiera sido respetar todo el proceso de trámite parlamentario y esperar a la votación de los presupuestos en las Juntas (el pleno del 21 de diciembre).
-¿EA no hubiera roto con un socio que se abstiene en su presupuesto?
-No, porque el del otro día no deja de ser el primer paso del trámite presupuestario. Pero reconocemos que la situación no es normal.
-¿Y si Aralar se hubiera abstenido en el pleno del 21 de diciembre?
-Entonces sí, porque el presupuesto es la norma más importante.
-¿EA sabía, como dijo Agirre a Aspuru hace ya tres semanas, que una abstención suponía salir automáticamente del Gobierno?
-No, pero lo intuíamos. Ahora no queda ninguna duda.
-¿Quién ha roto el tripartito?
-Los dos. Pensábamos que el ‘leit motiv’ de Aralar había sido la relación que existía dentro del tripartito, pero parece que detrás hay un debate interno. Nos parece irresponsable que todo esto haya acabado en ruptura. Además, no se puede hablar de falta de colaboración o deslealtad, cuando Aralar tampoco nos ha consultado ni informado a nosotros. La ruptura ha vuelto ha provocar una frustración al electorado nacionalista en Álava, que veía una esperanza en este tripartito.
-¿Cree que es «coherente» la postura de su ex socio, como argumentaron ellos para justificar su voto?
-Si responde a una estrategia, pretendiendo que EA pierda perfil ocupando nuestro espacio, nos parece una postura muy egoísta y poco entendible de cara al electorado nacionalista. Sobre todo porque compartimos un proyecto similar en Navarra, aunque desde la oposición.
-¿Temen que cualquiera de sus decisiones se entienda como un seguidismo a la estrategia de Aralar? ¿Su decisión les ha puesto en un brete teniendo en cuenta que poseen un electorado similar?
-No vamos a caer en ese error. Tomaremos las decisiones que consideremos oportunas. Es cierto que estaríamos más a gusto si siguiera el tripartito, pero sabemos que sacrificamos parte de lo que puede ser nuestro perfil o nuestro mensaje porque no podemos defraudar al mundo nacionalista en el territorio histórico dejando al PNV en minoría en las Juntas ante una posible moción de censura del PP.
-Es decir, que ratificarán su apoyo al presupuesto en el pleno de Juntas.
-Bueno, lo hemos apoyado inicialmente. En los presupuestos hay dos partes, una de gastos y otra de ingresos. En el primero hemos intervenido, pero en el segundo no, porque el gran acuerdo con el PSE está en materia fiscal. Estamos de acuerdo en cuestiones como las Sicav, pero no en asuntos como el de los 400 euros, donde apostamos por su eliminación para todos y en su lugar, reducir los tipos para las rentas más bajas y aumentarlos para las altas.
Molestos con el PNV
-Entonces, ¿descartan la abstención?
-Hay áreas del presupuesto, como subvenciones a asociaciones o a colectivos, que hacen una función social importante, que deben salir reforzados del presupuesto. Por ello vamos a hacer una serie de propuestas al PNV que creemos vamos a conseguir consensuar, y partir de aquí, se tomarán decisiones.
-Veo que no quiere desvelar qué van a hacer en el pleno de diciembre.
-Depende de las enmiendas. Creemos que el PNV será receptivo, pero si la pregunta es si podría ser que nos abstengamos, sí, podría ser.
-¿Pero qué tipo de enmiendas quieren introducir?
-En el capítulo de gastos, cuestiones como el Plan Mugarri (medio ambiente), que no tiene ninguna partida como tal, o el fomento del deporte escolar y el euskera. Y en el de ingresos, sobre todo aspectos como la lucha contra el fraude.
-¿Están molestos con el PNV?
-Sí. Hemos aprobado el proyecto por una cuestión de lealtad, pero más que con el tripartito, con la sociedad, porque unas cuentas con el sello nacionalista siempre serán mejoras que las del PP o las del PSE.
-¿EA es una piña en este espinado asunto? ¿Van todos a una?
-Las decisiones las toma la ejecutiva nacional y será la que decida.

Fuente: El Correo