La diputada de Eusko Alkartasuna en el Congreso, Begoña Lasagabaster, ha presentado una pregunta escrita en la que solicita al Gobierno de Madrid que explique las razones que le han llevado a renovar el llamado Acuerdo de Arcachon, sin tener en cuenta el rechazo reiterado de los pescadores del Cantábrico a esta firma. En la misma iniciativa parlamentaria, Lasagabaster plantea al Ejecutivo del Estado de qué forma piensa ahora atender y dar respuesta a las reivindicaciones de los arrantzales.

Una pregunta escrita en la que la diputada de EA dice que “los pescadores del Cantábrico han expresado su indignación por la reciente prórroga del llamado acuerdo de Arcachon, después de que el Gobierno de Madrid les hubiese prometido la obtención de mejoras en dicho acuerdo en una reunión celebrada la semana pasada. Un encuentro en el que las cofradías del País Vasco y Cantabria anunciaron al Director General de Recursos Pesqueros del Gobierno español que estaban dispuestos a romper el próximo año este convenio, si no se conseguían nuevas contrapartidas más favorables para su flota”.

La iniciativa recoge también la opinión de los pescadores afectados que consideran que “el Ejecutivo de Madrid, con la firma de esta prórroga, ha actuado a sus espaldas y una vez más no ha defendido sus intereses frente a las exigencias galas”, una renovación que ha llevado a los pescadores a indicar que “será responsabilidad de la Administración española los enfrentamientos que puedan producirse cuando se inicie la costera de la anchoa entre el 13 y 14 de abril”.

La pregunta escrita al Gobierno presentada por Begoña Lasagabaster recuerda también las reivindicaciones, que desde hace años, vienen exigiendo a la Administración central los pescadores del Cantábrico como “el respeto de los pescadores franceses a la actual parada primaveral, desde el 20 de marzo al 1 de junio, paradas durante los fines de semana, poder capturar cebo vivo cerca de la costa, la prohibición de arrastre pelágico para anchoa y bonito más al sur del paralelo 46 y la posibilidad de acceso hasta las seis millas francesas durante todo el año para la captura de pelágicos”.

Fuente: Begoña Lasagabaster