El grupo parlamentario de Eusko Alkartasuna ha solicitado la celebración de una sesión de trabajo con las coordinadoras de euskaldunización de adultos AEK e IKA en la comisión de Educación del Parlamento de Navarra, a fin de que expongan el balance de su actividad en los últimos años, su financiación y la participación en dicha financiación por parte del Gobierno de Navarra.

Según explican estas organizaciones en un dossier entregado a los grupos parlamentarios, actualmente son cuatromil las personas adultas que han optado por aprender euskera, de los cuales aproximadamente la mitad ha elegido los euskaltegis de la Administración, mientras que el resto ha elegido la iniciativa popular que engloban AEK e IKA.

Por su parte, la presidenta de EA y portavoz parlamentaria, Begoña Errazti, recuerda que la normativa navarra en materia lingüística establece el deber de la Administración Foral de Navarra de proteger el euskera, como patrimonio cultural propio y común, y de garantizar su enseñanza. Así, a fin de conocer la implicación actual de la Administración navarra en estos objetivos, también en relación con la oferta dirigida a adultos, y de saber de primera mano la situación actual de las gaueskolas navarras, “creadas por iniciativa popular para atender la demanda de aprendizaje de euskera por parte de los adultos que no han tenido ocasión de estudiarla en la enseñanza, bien por falta de desarrollo de los medios necesarios en el momento en que afrontaron sus estudios, bien porque sus familias en su momento optaron por otros modelos”, ha solicitado la comparecencia en el Parlamento de los responsables de AEK e IKA.

La petición de comparecencia viene justificada por la reducción sistemática, en los últimos años, de la partida presupuestaria asignada a la subvención de la labor de dichas iniciativas populares, “con el perjuicio que ello supone para los alumnos que optan por esta opción de enseñanza, en muchos casos, no habiendo podido acceder a otras, y ven que, de año en año, la Administración Foral lejos de propiciar y fomentar su esfuerzo lo torpedea, restringiendo una financiación ya de por sí limitada”, afirma.

Fuente: Begoña Errazti