El senador José Ramón Urrutia considera la medida una decisión política y critica que el plazo establecido es demasiado largo José Ramón Urrutia, senador de Eusko Alkartasuna, ha presentado una batería de preguntas dirigidas al Gobierno de Madrid sobre el acuerdo alcanzado por el Consejo de Ministros de la Unión Europea la pasada semana en materia de pesca en las que, entre otras cosas, pregunta al Ejecutivo si no considera las medidas adoptadas “una apertura encubierta de la pesquería de la anchoa”. Urrutia considera que la medida fue tomada en base a intereses políticos y critica que el plazo establecido para la veda es demasiado largo, “porque, al fin y al cabo, se permitirá que 28 barcos capturen anchoa en plena costera, lo cual no ayuda en absoluto al objetivo de la recuperación de la especie”.

El representante de Eusko Alkartasuna en el Senado opina que la decisión de permitir capturas experimentales entre abril y junio, como ha decidido la UE, es contraria a los criterios científicos y de sostenibilidad del sector y constituye en realidad un levantamiento parcial de la veda. Por ello, pregunta al Gobierno español si considera si el establecido es el mejor procedimiento para evaluar las reservas de anchoa y conocer la situación de la biomasa. Igualmente, cuestiona el número de embarcaciones autorizadas a pescar, “que parece excesivo si el único objetivo es recoger muestras y en un periodo de tiempo bastante largo”.

El senador abertzale duda de que la medida haya sido tomada pensando en las necesidades del sector y en base a criterios técnicos. Así, pide al Gobierno su opinión sobre si el acuerdo no puede considerarse una concesión a Francia, “que bloqueó un principio de acuerdo de cierre de los caladeros del Golfo de Bizkaia, hasta la recuperación total de la especie”, y considera que la solución al difícil momento que vive el sector “debería haberse dejado en manos de expertos y científicos, en vez de buscar una solución de tipo político”. Urrutia recuerda que existen informes técnicos y científicos en los que se demuestra la necesidad de cerrar el caladero del Golfo de Bizkaia para garantizar la recuperación de la anchoa.

Fuente: José Ramon Urrutia