Europa trata de normalizar el conflicto catalán mientras el Estado sigue tensando la cuerda con la inhabilitación de Torra
Eusko Alkartasuna exige la inmediata puesta en libertad de Oriol Junqueras, tras la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE ratificando que su elección como eurodiputado le otorga inmunidad. La formación llama la atención sobre el hecho de que una vez más la Justicia Europea ha mostrado las carencias de la española, reflejándola como la instancia dependiente de los poderes políticos que es, como demuestra la inhabilitación al president Torra.
La sentencia europea evidencia que el juicio contra los dirigentes catalanes fue un proceso interesado para tratar de anular el republicanismo catalán, cuyas reivindicaciones son tan básicamente democráticas como realizar un referéndum que dé a la ciudadanía la capacidad de decidir sobre su futuro.
El texto hecho público hoy deja en evidencia igualmente la pretensión del Gobierno de Madrid de designar a los cargos públicos, que lo son por el hecho de haber sido elegidos por la ciudadanía, no por jurar la Constitución.
Eusko Alkartasuna ha manifestado su profunda satisfacción por la sentencia, que aporta normalidad a una situación carente de política y con demasiado autoritarismo: es una buena noticia desde el punto de vista del europeísmo y de la separación de poderes. La justicia española, sin embargo, continúa su camino de tensionar la situación, inhabilitando al president Torra por mantener un símbolo tan asumido por la ciudadanía catalana como el lazo amarillo.
La decisión del Tribunal de Justicia de la UE abre también las puertas a que tanto Carles Puigdemont como Toni Comín, ambos eurodiputados elegidos por el pueblo catalán, puedan ejercer como tales, algo que, además, harán en el grupo de la Alianza Libre Europea, en el que participa Eusko Alkartasuna.