´Los hechos proporcionan plena credibilidad a la denuncia de una de las personas encarceladas, que declaró haberse autoinculpado bajo tortura´
La presidenta de Eusko Alkartasuna y portavoz parlamentaria en Nafarroa, Begoña Errazti, considera ´una auténtica aberración en un Estado que se define democrático y de derecho, que puedan producirse con total impunidad unos hechos como los ocurridos a cuatro ciudadanos navarros, que han estado dos años en la cárcel acusados de un delito que nunca cometieron y que siempre negaron judicialmente´.

La presidenta de Eusko Alkartasuna advierte que ´este es un claro ejemplo de lo que supone la vulneración sistemática de la presunción de inocencia para aquellos delitos vinculados al terrorismo´ y subraya que ´no estamos ante un simple error judicial, sino ante un hecho muy grave que debería acarrear responsabilidades para sus causantes, y que evidencia las graves carencias democráticas y de derechos ciudadanos del Estado´.

´¿Quién repara a los afectados, sus familiares y allegados los daños y perjuicios de todo tipo que les ha ocasionado esta terrible situación? ¿Qué fue de la denuncia por torturas que presentó uno de los detenidos como causa de su ´autoinculpación´, ahora totalmente desmentida por la realidad de los hechos? ¿Quién se autoinculpa falsamente de un delito tan grave por su propia voluntad? Los hechos proporcionan plena credibilidad a la denuncia de una de las personas encarceladas, que declaró haberse autoinculpado bajo tortura´, opina.

La presidenta de Eusko Alkartasuna se pregunta ´desde cuándo se sabía que las personas detenidas no estaban implicadas en el asesinato que se les imputaba´ y ´a qué se esperó para hacer efectiva tal constatación en la situación de los injustamente encarcelados´. ´Son múltiples las preguntas que cualquier ciudadano puede hacerse sobre estos hechos tan graves, y muy pocas las respuestas que nos da un Estado obsesionado en reprimir a los discrepantes, con el ´paraguas´ político de que todo está justificado para combatir al terrorismo´, expone Errazti.

´La privación de libertad es un recurso de la sociedad para defenderse de quienes vulneran los derechos de los demás. Pero siempre desde el escrupuloso proceso judicial pertinente y con la seguridad de que se aplica a quien actúa contra el derecho personal y social´, señala.

´Sin embargo, en este caso se aplicó sin indicios suficientes de comisión de delito, hecho gravísimo pero inmerso también en una coyuntura de manipulación e inculpación desde el Ejecutivo del PP, más interesado en buscar culpables, que en asegurarse que las personas detenidas efectivamente lo fueran. Un Partido Popular que vulneró, desde su acción de gobierno, la separación de poderes, la presunción de inocencia, el derecho a la reinserción y una larga lista de derechos y libertades individuales y colectivos que exigimos al nuevo gobierno que restituya y respete´, concluye Begoña Errazti.

Fuente: Begoña Errazti