Considera “ofensivo” el apelativo de ‘burla’ empleado por el líder del PP en alusión a los esfuerzos para alcanzar la paz, y responde al PSOE que “el derecho a decidir es indispensable para una solución democrática al contenc La presidenta de Eusko Alkartasuna, Begoña Errazti, advirtió esta tarde en una conferencia pública celebrada en Ordizia que “la sociedad vasca no perdonará a quien trunque la dinámica positiva del proceso”, en referencia a las bombas colocadas por ETA y a los altercados de las últimas semanas así como “a iniciativas judiciales con una clara pretensión política de boicotear cualquier avance y entendimiento para alcanzar la paz”.

En su intervención, la dirigente de Eusko Alkartasuna recordó que “la pacificación y la normalización política, habiendo sido una exigencia constante de la sociedad vasca, es ya un mandato expreso y urgente de los ciudadanos, que debemos abordar con responsabilidad, por las consecuencias dolorosas y duras que supone” y recordó que “constituye el reto más importante de nuestro país”.

“No podemos aceptar que quienes durante ocho años fueron incapaces ni tan siquiera de acercarse a este objetivo desde su responsabilidad al frente del Gobierno en Madrid califiquen ahora de ‘burla’ los esfuerzos de los agentes políticos y sociales que estamos trabajando, al menos en EA, para conseguir acabar con una situación que ha lastrado a nuestro país desde hace décadas. La afirmación del señor Rajoy de que se opone a cualquier negociación ‘salga bien o salga mal’ es una absoluta aberración, que demuestra que para algunos es preferible que el conflicto y la violencia se perpetúen. Lo cierto es que las vías actuales están siendo más eficaces, y seguramente es esto lo que molesta al PP, obcecado de momento en una estrategia de desestabilización con claros fines electoralistas en España, aun a costa de frustrar cualquier esperanza a la sociedad vasca”, apunta.

“Estrategia en la que se enmarcan también la decisión judicial de ampliar las penas a presos de ETA o la orden de encarcelamiento contra Arnaldo Otegi y que demuestran que en este poder persisten sectores afines al PP dispuestos a poner todas las trabas posibles al proceso, incluso traicionando principios jurídicos básicos, como la no retroactividad de las leyes, o enfrentándose si hace falta al Congreso, negándose a dar explicaciones, como hizo ayer otra vez el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Francisco José Hernando” subraya.

“DERECHO A DECIDIR, INHERENTE AL PUEBLO VASCO”

A juicio de Errazti, “vivimos una coyuntura de tensionamiento y medición de fuerzas, en la que estamos observando amagos de volver a dinámicas anteriores. Pero no podemos caer en ese error, porque representan un callejón sin salida”.

“Las vías políticas deben imponerse como un hecho irrefutable, para acabar definitivamente con el dolor y con todas las consecuencias de la violencia, y consolidar un proceso que, necesariamente, ha de culminar con una normalización política que reajuste el marco jurídico a la voluntad de la mayoría de la sociedad vasca. Debemos llegar a acuerdos sobre este marco, sobre el método de decisión, pero negar esta necesidad es no ver la realidad, y ésta acaba imponiéndose por sí misma” dijo.

“La sociedad vasca es una sociedad sufriente pero madura, que ansía la paz y la exige. Una sociedad que se siente pueblo, y como tal ha reclamado en las urnas su derecho a decidir. Imponer como premisa básica para constituir una Mesa de Partidos la lealtad a la Constitución es jugar con precios políticos, precisamente por parte de aquellos que dicen negarse a aceptarlos y negar el principio democrático básico a pensar distinto. En definitiva, imponer renuncias ideológicas a la mayoría, y no asumir la realidad de un país que históricamente ha desarrollado una soberanía propia y diferenciada. Planteamientos como éste, de minorías frente a mayorías, son los que realmente contribuyen a desvertebrar la sociedad, no al contrario. En cualquier caso, es imprescindible anteponer la constitución de esa Mesa de Partidos necesaria, al debate político de fondo, o de lo contrario resultará muy complicado avanzar en el proceso”, opinó.

“El derecho a decidir es inherente a Euskal Herria como pueblo, al margen y por delante de la existencia de ETA, y su ejercicio es indispensable para una solución democrática al contencioso vasco”, concluye.

Fuente: Begoña Errazti