Pello Urizar, secretario general de Eusko Alkartasuna, ha hecho balance político del año lamentando que “hay quienes intentamos hacer camino al andar y quienes se limitan a juzgar el camino andado por los demás, en base a una legitimidad que nadie les ha dado”.

Beharrezkoa dirudi azken 12 hilabeteetan bizitakoaz balantze bat egiten amaitzea urtea, askorako eman baitu gainera 2011. urteak Euskal Herriaren kasuan.

Garbi dago, euskal politikaren egoerak hobera egin duela azken urteetan, eta, gatazkaren konponbideak izugarrizko pausoak eman dituela. Hain nabaria da, oraindik pauso asko falta direla emateko, eta horrek alderdi politiko eta instituzioen aldetik konpromiso garbia eskatzen du.

Laburpen txiki bat eginez, esan genezake 2011. urtea ETAk borroka armatua uzteak markatzen duela, eta bide batez, hauteskundeetarako indar soberanisten batuketaren formula estrategikoa sortzeak ere.

Efectivamente, haciendo un resumen muy escueto podríamos decir que 2011 vendrá marcado por el cese definitivo de ETA y por la articulación de la fórmula, estratégica y electoral, de la acumulación de fuerzas soberanistas.

Durante el año 2011, hemos asistido a importantes avances en materia de pacificación. Con la base del Acuerdo de Gernika, con la adhesión de innumerables agentes políticos, sociales y sindicales, la ciudadanía se ha elevado a la categoría de protagonista del proceso de paz.

Y la última declaración de ETA, anunciando su cese definitivo, como consecuencia del proceso político desarrollado en los últimos dos años, ha supuesto ver materializado una necesidad democrática y un deseo de la sociedad.

También en el difícil camino de la reconciliación se ha avanzado en este año. De manera muy meditada para asegurar que los pasos serán firmes y sin vuelta atrás, se están poniendo las bases para el reconocimiento y la reparación de todas las víctimas.

 

Pacificación es una de las bases del proceso que estamos viviendo. Otra es normalización, y también en este ámbito hemos comenzado a recorrer el largo camino que tenemos por delante. Pese a que la losa de la ilegalización continúa sobre un sector político vasco, lo cierto es que la irrupción de Bildu y Amaiur en las elecciones forales y municipales y en las generales, ha comenzado a hacer posible que las instituciones sean un reflejo de la sociedad.

Así mismo, la apuesta por la unidad de fuerzas abertzales ha vuelto a llevar a las urnas a miles de independentistas que demandaban a los partidos que aparcásemos los intereses partidistas para defender los derechos de Euskal Herria.

Debemos decir que en Eusko Alkartasuna nos sentimos especialmente orgullosos de esto, porque somos conscientes de la importancia de volver a activar a un colectivo importante de abertzales claramente identificados con el independentismo defendido por vías pacíficas que demandaban la unidad de acción tal y como la hemos conseguido poner en marcha en este 2011.

Independentismoa instituzioetara iritsi da, eta Udal eta Aldundiak Euskal Herriko errealitate politiko eta sozialaren islada dira jada. Gainera, alderdi guztiekin akordioak lortzeko kapaz izan da eta gestio almena erakutsi du.

Herriaren normalizaziorako aurrera pauso bat da hau, baina demokrazia ez da osoa izango Euskal Herrian, marko juridiko politikoak euskal gizartearen nahiak erantzun arte.

Urte amaierak beste gako bat utzi digu gainera: komunitate internazionala, hasi berri dugun prozesuan laguntzeko prest agertu da, bere esku dagoen ehinean. Euskal gatazkaren aurrean inongo instantzia internazionalik agertuko zela irrigarritzat jo duten diskurtsoen aurrean, Aieteko konferentziak Euskal Herria agenda internazionalean dagoela erakutsi zuen

Beharrezkoa den bide bat igarotzen ari garela egiaztatzen dugu, hala ere, 2011.urtea, emandako pausoak alde bakarrekoak soilik izan diren sentsazioarekin amaitzen dugu.

Era berean, beraien posizioetatik mugitu nahi ez dutenen exigentziengatik markatutako egoera batetan gaude, eta hau ez da prozesuak eskatzen duena, ezta Euskal gizarteak exigitzen duena ere.

Bidea ekinez egiten saiatzen garenak gaude. Eta beste alde batetik, mugitzea ukatzen dutenak, eta, inork eman ez dien legitimitate batetik, ez euskal gizarteak behintzat, besteek egindakoa juzgatzen jarduten dutenak daude.

El independentismo ha llegado a las instituciones, de forma que ayuntamientos y diputaciones son ya reflejo de la realidad social y política de Euskal Herria y, además, ha demostrado capacidad de gestión y de llegar a acuerdos con todos los partidos políticos. Con todos.

Esto es un paso adelante en la normalización del país, pero la democracia no será completa en este país hasta que el marco jurídico político responda a las aspiraciones nacionales de la sociedad vasca.

El año que termina nos ha dejado otra clave, además: la comunidad internacional está dispuesta a acompañarnos en el proceso que hemos comenzado, a colaborar en lo que esté en su mano. Frente a los discursos que poco menos que ridiculizaban la posibilidad de que alguna instancia internacional pudiera interesarse por la resolución del conflicto vasco, la Conferencia Internacional de Aiete demostró que Euskal Herria está en la agenda internacional.

Constatamos que estamos recorriendo un camino necesario, sin embargo, terminamos 2011 con la impresión de que los pasos dados han sido demasiado unilaterales y marcados por las exigencias de quienes desde una supuesta superioridad moral se niegan a moverse de sus posiciones. Y eso ni es lo que necesita el proceso ni lo que demanda la sociedad vasca.

Hay quienes intentamos hacer camino al andar. Y hay quienes se niegan a moverse y se limitan a juzgar el camino andado por los demás, en base a una legitimidad que nadie les ha dado, por lo menos, no la sociedad vasca.

Esta es una de las cosas que tiene que cambiar en 2012. Porque en estos momentos, creemos que la pelota está en el tejado del Gobierno español, del PSE y también del PNV.

El Gobierno español, el PP, debe abandonar el inmovilismo que le ha caracterizado. Para resolver el conflicto político vasco debe mirar a Euskal Herria, no hacia el sur del Estado. De hecho, para comenzar a moverse, casi le bastaría con hacer caso a sus compañeros del PP del País Vasco.

El PSOE, con el batacazo electoral del Estado y la lehendakaritza amortizada, debe ser valiente y quitar el vértigo que todavía le da trabajar con Bildu para sacar adelante temas en materia socioeconómica desde una perspectiva progresista y también, por supuesto, en materia nacional. El PP debe mirar a sus compañeros vascos y el PSOE puede mirar a determinados sectores del PSE para hacerlo. Referencias tiene.

Y el PNV tiene un reto importante. Tiene que asumir que el independentismo es ya la referencia principal para miles de abertzales. De hecho y con los datos de las últimas elecciones en las manos, es ya la opción hegemónica en Araba, Gipuzkoa y Nafarroa.

Por otra parte, parece que ya ha elegido compañero de viaje para los temas económicos. Tiene que decir a la sociedad si este compañero, el PP, es el que va a tener para el resto de cuestiones. Es una decisión legítima. Sólo pedimos que sean claros a la hora de trasladar sus planes de futuro a la ciudadanía. Porque en 2011 ha llegado a Euskal Herria la hora de la política y en materia nacional sólo hay dos opciones: respetar la capacidad de decisión de la ciudadanía vasca o no hacerlo.

Espainiako Gobernua mugitu behar da behingoz, eta lehenengo pausuak emateko Euskal Herriko PPko ordezkariei kasu egitea nahikoa du. PSOEk Bildurekin elkarlana burutzea ematen dion beldurra gainditu behar du, helburu berdinen alde lanean gauza interesgarriak lortu ditzakegulako. Eta EAJk egungo egoera politikoa zein den aitortu behar du, horren aurrean zer egin erabaki ahal izateko. Maila ekonomikoan PPrekin lan egingo duela erabaki du eta gizarteari esan behar dio maila politikoan ere bere aukera PP edo abertzaleok garen.

Por parte de Eusko Alkartasuna nuestro reto más importante es continuar imprimiendo nuestra impronta a la acumulación de fuerzas abertzales, un objetivo que nos marcamos en 2008 y hacia el que caminamos durante tres años contra viento y marea.

Además, trabajaremos muy seriamente para que la implicación que la sociedad vasca nos ha demostrado durante todo el proceso de cambio político continúe. Que la activación de esos miles de votos que en ocasiones anteriores optaban por quedarse en casa sea definitiva. Porque ha sido eso lo que nos ha hecho al independentismo ser la primera fuerza en representación en Euskal Herria.

Fuente: Eusko Alkartasuna