Presenta un informe de diagnóstico de situación de la lengua en Euskal Herria, en el que hace hincapié en la consideración del euskera patrimonio inmaterial europeo y resalta que el último informe de los técnicos del Consejo de Europa destinaba 40 de El Secretario de Euskera, Cultura y Educación de la Ejecutiva Nacional de Eusko Alkartasuna, Martín Aranburu, presentó esta mañana acompañado por el representante de EA en la coalición Europa de los Pueblos, Mikel Irujo, un informe sobre la situación del euskera en Euskal Herria, que hacía especial hincapié en el caso de Navarra. Además, hace hincapié en la consideración de esta lengua como patrimonio inmaterial (figura aprobada recientemente en la Ley de Patrimonio Cultural de Navarra) tanto de Navarra, Euskal Herria como de Europa. El informe tendrá un desarrollo interno, dentro del partido, que culminará con la aprobación de las líneas políticas que este partido propondrá desarrollar a partir de ahora en el contexto de todo el país y en la UE.

Eusko Alkartasuna decidió unir la celebración del Día de Navarra y del Día Internacional del Euskera en reivindicación del origen de esta lengua, hablada por el propio San Francisco de Jaso, patrón de Navarra, y en denuncia de la política lingüística de restricción de la presencia pública y administrativa del euskera y de negación de derechos que el Gobierno de UPN – CDN está aplicando en este territorio. Asimismo aprovechó la ocasión para resaltar el carácter de ‘patrimonio inmaterial’ del euskera, cuyo desarrollo legal potencial estudiará en los próximos meses internamente, a fin de ofrecer a la protección de esta lengua una nueva base jurídica de mayor calado que el la reconocida hasta el momento en el conjunto de Euskal Herria.

Según explicó Aranburu, el informe se basa en los estudios realizados por distintos organismos de defensa de esta lengua, así como el último informe de los técnicos del Consejo de Europa sobre el tratamiento a las lenguas minorizadas en el Estado español que, resaltó, “dedica 40 de las 177 páginas de análisis específicamente al caso concreto de Navarra, además, en sentido claramente crítico, hecho que no es habitual por parte de técnicos europeos, lo que da la medida de la gravedad con que juzgan la política en este ámbito que se desarrolla en Nafarroa”.

Además de este análisis, el informe incorpora la posición de EA en este tema y propone medidas concretas, sobre la base del respeto a los derechos lingüísticos “que son de carácter personal”, y que en el caso de Navarra no son respetados en los espacios de la Administración Pública. Cita las sucesivas resoluciones judiciales en contra de los planes de del Gobierno de Navarra, con especial alusión al previsto para la zona vascófona, y anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, así como el uso exclusivo del castellano por parte de todos los departamentos en su relación con los administrados, y de instituciones anexas como el Instituto Navarro de Estadística. Alude también a la actitud del Ayuntamiento de Iruña, y a las diversas sentencias del TAN denunciando la falta de euskera, así como la ausencia total de esta lengua de la Universidad Pública de Navarra “centro con vocación de atender a todos los navarros”.

LENGUA PROPIA Y PATRIMONIO INMATERIAL EUROPEO

Por su parte, Mikel Irujo recordó las últimas iniciativas del grupo parlamentario de EA. Una moción en la que se exigía la aplicación de todas las recomendaciones europeas del último informe, y la petición de comparecencia de Pedro Pegenaute, “cuyo desenlace, con acusaciones que vinculaban a esta lengua con la violencia, es una clara muestra del uso político nefasto que UPN hace del euskera, utilizándolo como arma arrojadiza y presentándolo como un elemento enemigo de Navarra”.

“El euskera es lengua propia de Navarra, tal y como recoge la propia Ley del Euskera, patrimonio cultural e inmaterial de Navarra, Euskal Herria y de Europa, y como tal merece protección y medios para su desarrollo”, afirmó. “La vinculación de Navarra con el euskera es originaria e histórica, por eso unimos ambas celebraciones hoy, en reivindicación de nuestras raíces, del necesario respeto a los derechos lingüísticos de todos los navarros y navarras y del valor patrimonial de esta lengua en nuestra sociedad”, sentenció.

“Afortunadamente, la inmensa mayoría de la ciudadanía navarra aprecia y respeta esta lengua, muestra de lo cual es la demanda de enseñanza en esta lengua en ikastolas y modelo D, pese a todas las trabas que impone la Administración a su desarrollo, contradiciendo la recomendación de las instituciones europeas que consideran este modelo idóneo para promover y fomentar la diversidad lingüística y proteger una lengua en situación desfavorable. La sociedad sigue yendo por delante de los gobernantes actuales de Navarra, y no ceja en su empeño de reclamar centros educativos bilingües (euskera – castellano), en exigir señalización bilingüe en nuevas vías (A – 12). El que va contracorriente en este tema sigue siendo UPN”, concluye.

Fuente: Martin Aranburu