La publicación califica a los nacionalistas de antidemocráticos y los relaciona con la violencia
Eusko Alkartasuna ha presentado una moción en JJGG de Álava en la que solicita que se retire el anagrama de la Diputación Foral de Álava de una publicación tendenciosa que manipula y difama a una gran parte de la sociedad alavesa y al pueblo vasco en general.

Mikel Mintegi, juntero de EA, ha denunciado que la Diputación ha patrocinado una publicación (´Vocabulario democrático del lenguaje político vasco´) que ´ataca a la mitad más uno de esta Sociedad y lo que es más grave, ha cedido el uso de su anagrama para que lo utilicen terceras personas con fines totalmente malintencionados y ajenos a lo que los alaveses esperamos y nos merecemos de nuestra institución´.

Mintegi solicita explicaciones a los responsables de que esta publicación haya contado con la colaboración de la Diputación ´ya que existe el riesgo de que muchos identifiquen este libro y sus contenidos injuriosos con la institución de todos los alaveses´. En este sentido, el representante de EA ha preguntado ha Rabanera si este es su método para fomentar valores como la tolerancia, respeto y el entendimiento en el territorio.

Mintegi, tras criticar la actuación de la DFA y solicitar que se corrija el grave error cometido por sus actuales responsables ha realizado un breve resumen de algunos de los contenidos que aparecen en el mismo afirmando que está redactado con actitud negativa y con la intención de hacer daño a todo un sentir´

´El vocabulario democrático del lenguaje político vasco´ ha sido editado por el colectivo ´ciudadanía y libertad´, sus autores son Jose María Salbidegoitia y Javier Montaña, el prólogo es de Mario Onaindia y aparece como entidad colaboradora la Diputación Foral de Álava. El libro cuenta con un índice variado en el que se hace una dura e injuriosa crítica al sentir de una parte mayoritaria de este pueblo y ´falta al respeto´ a una serie de organizaciones y colectivos de Euskalherria como obispos, sindicato ELA, Elkarri, Medios de comunicación y partidos políticos nacionalistas.

Fuente: Mikel Mintegi