El secretario de organización de EA, Rafa Larreina, consideró hoy que la decisión de decretar la apertura del juicio oral contra el lehendakari, Juan José Ibarretxe, es ´un proceso claramente de intencionalidad política, que no tiene nada que ver con el derecho penal´, y aprovechó la ocasión para volver a reclamar ´un poder judicial vasco propio´.

En declaraciones en los pasillos del Parlamento vasco, Larreina dijo que ´detrás de estos procesos hay un impulso político claro´, y añadió que lo que pretende es ´debilitar las dos posiciones mayoritarias en este país´. Estas posturas son ´la apuesta por el diálogo, para resolver los problemas político´ y la otra ´la apuesta del Gobierno vasco por un nuevo marco jurídico-político y por el reconocimiento del derecho de decisión´.

´Queremos decir con total claridad que no van a conseguir debilitar ni un objetivo ni otro´, aseguró el representante de EA, antes de subrayar que ´detrás de estas posiciones judiciales hay una débil concepción de lo que es el estado de derecho democrático´.

En su opinión, ´en ningún lugar de la Europa civilizada se concibe que se pueda juzgar a un presidente de Gobierno por cumplir con su obligación, desarrollar sus funciones y establecer un diálogo democrático con todos los representantes de la sociedad a la que debe servir´.

Tras considerar que ´esto es inconcebible en un marco del Estado de derecho democrático´, manifestó que ´si con estas iniciativas se pretende trasladar a la sociedad vasca la foto de un lehendakari en el banquillo de los acusados, lo harán pero no podrán engañar a la sociedad´.

´La sociedad vasca respalda la posición del lehendakari y de todos los partidos que estamos comprometidos con el diálogo y que hemos mantenido reuniones habituales con líderes de la ilegalizada Batasuna´, agregó.

Asimismo, reiteró que EA ´se ha reunido, se está reuniendo y seguirá reuniéndose´ porque su obligación es ´ejercer el diálogo político y los instrumentos que la democracia pone en sus manos para resolver los problemas políticos´, de los cuales el principal es la normalización y la pacificación, que están ´en el primer lugar de la agenda de EA´.

Larreina dijo que ´el primer instrumento para resolver los problemas es el diálogo político, sin ningún tipo de limitaciones´ y concluyó reclamando ´un poder judicial vasco propio´, que ´tiene especial vigencia con este tipo de actuaciones´.

´Es necesario que haya un poder judicial vasco que no esté sometido a los vaivenes de la intervención política, a los intereses partidistas en el conjunto del Estado y a las pugnas que mantienen PP y PSOE alrededor del control del Consejo general del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional´, añadió.

Por último, denunció la ´deslegitimación del poder judicial que se está haciendo en el Estado por parte de PP y PSOE´, que ´están dando un triste espectáculo sobre el control partidista de la justicia´, y dijo que este es ´un argumento más que suficiente para reclamar un poder judicial vasco al margen de esas tendencias´ y que responda a ´un estado de derecho democrático, en el que la separación de poderes sea una realidad y no una mera declaración de intenciones´.

Fuente: Rafael Larreina