Kataluniak ERCren erakundeetan lan egiteko tradizioa duen ezkerreko independentismoa behar du.

Pello Urizar, secretario general de Eusko Alkartasuna ha participado esta tarde en el acto central de campaña de Esquerra Republicana de Catalunya, arropando al candidato republicano a presidente, Orioll Junqueras.

Bona tarda!

Va ser un honor per a mi participar en la histórica manifestaciò independentista de la Diada i ès avui un privilegi estar aquí amb els nostres germans d´Esquerra.

Para mí hablar en un acto político de Esquerra es jugar en casa. Y lo digo con la convicción natural que dan los muchos años de trabajo en común, muchos años de luchar por el derecho de autodeterminación de nuestros respectivos pueblos, de hacer frente a las ofensivas de Madrid.

Las y los independentistas de izquierda vascos venimos de unas elecciones en las que hemos conseguido unos magníficos resultados, hemos recabado el apoyo de decenas de miles de vascos y vascas que han posibilitado alcanzar cotas de representación jamás conseguidas por el independentismo de izquierda y que han dejado claro que los partidos de obediencia española no son mayoría. Nunca lo han sido, aunque hayan intentado colarnos ese trágala durante los últimos años.
Hoy, nuestros países viven situaciones similares por la trascendencia política e histórica de lo que estamos viviendo. Y aunque he de reconocer que miramos con envidia, sana envidia, la situación por la que estáis transitando en Catalunya, vuelvo a recalcar que para los y las independentistas de izquierda vascas también estamos viviendo momentos de trascendencia política.

Y lo digo porque de la misma manera que lo ha decidido el pueblo catalán, que lo habéis decidido vosotros y vosotras, hemos decidido tomar las riendas de nuestro futuro y la decisión está sólo en nuestras manos. Y eso va a ser posible porque por primera vez en muchas décadas, la violencia no va a ser ni obstáculo ni excusa para poder realizar ese tránsito hacia la libertad de Euskal Herria.

Eso es algo que los militantes de Esquerra y Eusko Alkartasuna hemos tenido claro desde siempre, y por fortuna el tiempo nos ha dado la razón. De la misma manera que siempre hemos dejado muy claro también que nuestros respectivos países nunca van a tener futuro dentro del estado español. Algo que por fin parece a calado en aquellos que buscaban un encaje en España, y digo parece porque la función no termina hasta que baja el telón, aunque tengo claro que Esquerra no saldrá de la sala hasta que compruebe que todo queda amarrado y bien amarrado.

Y ante esta tesitura nuestra obligación ha de ser siempre la de dar la bienvenida al independentismo, y además sin reproches, que podríamos hacerlos. Supongo que recordáis la dejación que el PNV hizo del llamado plan Ibarretxe cuando en Madrid dijeron que NO. Lo recordáis tan bien como los abertzales recordamos la nocturnidad y alevosía con la que actuó Artur Mas en la negociación de la reforma del Estatut.

Podríamos ahondar en las críticas y los reproches, pero no lo vamos a hacer. Porque lo que importa ahora es actuar como país frente a la ofensiva del Estado.

Porque la ofensiva del Estado existe. Hemos de ser conscientes de ello y por eso es importante que encuentren un pueblo enfrente. Un país dispuesto a tomar las riendas de su futuro y a dejar claro que nada es más fuerte que la voluntad popular.

Hay que subrayarlo. Consultar a la ciudadanía, que la sociedad decida en base a qué marco jurídico político quiere organizarse es simple y llanamente democracia. Y cuando el Estado dice que va a hacer todo lo posible para impedir la consulta está demostrando que tiene un déficit democrático impresionante. Y para esto da igual que sea Rajoy que Rubalcaba. Da igual PP que PSOE. En Euskal Herria se dice que en cuestión nacional no hay nada más parecido a un español de derechas que un español de izquierdas. Supongo que estáis de acuerdo.

Somos claros. Independencia es lo que solicitamos para nuestros respectivos pueblos. Pero no porque ese sea nuestro objetivo final. La independencia es una vía, es un camino que nos va a permitir, junto con un proyecto socioeconómico de izquierda, superar esta brutal crisis económica que vivimos y alcanzar una sociedad basada en la justicia social. No queremos la independencia para profundizar en el modelo neoliberal que nos ha traído a esta situación de crisis sistémica, no queremos ser Estados sometidos a los dictados de los mercados, el FMI o el banco mundial. Queremos aplicar otras políticas para poder aspirar a una sociedad más justa y para eso necesitamos todas las herramientas en nuestras manos, para eso necesitamos la independencia.

Y para que esos dos objetivos se hagan realidad estoy firmemente convencido de que Esquerra, el independentismo de izquierda y tradición institucional es lo que necesita Catalunya en este momento histórico. El apoyo masivo a Esquerra garantizará que lo que vivimos en la última Diada no quede en agua de borrajas.

El independentismo vasco ha tenido a Catalunya muy presente durante la campaña electoral. No sé si sabéis que uno de los momentos más emocionantes de la campaña de Euskal Herria Bildu fue un impresionante castell culminado por una ikurriña y una estelada que puso en pie a 15.000 personas gritando en euskera y en catalán Independentzia! Indapendènsia!

Me despido con dos peticiones. La primera que el primero que entre a la Unión Europea con Estado propio, sea Euskal Herria o Catalunya, sujete la puerta al otro, porque no vamos a tardar.

La segunda petición es un compromiso, el mismo que les hemos pedido a las y los independentistas vascos, a las y los abertzales: vivimos un momento histórico. No lo dejéis pasar.

¡És el momento dels pobles, de la independencia, de construir el nostre futur i no hi ha estat que ens pugui aturar!

Gora Euskal Herria askatuta!
Visca Catalunya!

Jatorria: Eusko Alkartasuna