Unai Ziarreta, EAren presidentea «El año que viene será bueno para nosotros». Unai Ziarreta ve de esta manera el futuro en lo personal -será padre por segunda vez- y en lo político -«EA va a tener un buen resultado en marzo»-. Sin querer ahondar en las críticas que ha recibido desde el PNV por su posición en los casos Balenciaga y Guggenheim, navega entre dos aguas: la de lanzar dardos contra Iñigo Urkullu y Patxi López y la de tratar de distanciarse de Ibarretxe -«lleva mucho tiempo gestionando Euskadi»-, al tiempo que subraya que el Gobierno vasco tripartito «ha funcionado bien» los últimos ocho años.

-¿Cómo han afectado los casos Balenciaga y Guggenheim a la relación con el PNV?

-No deben afectar. Nosotros entendemos que, cuando hablamos de la gestión de fondos públicos, es comprensible que los grupos tengamos posiciones diferentes.

-Ha asegurado que EA ha recibido presiones del PNV.

-Sí, ha habido cierto malestar en el PNV. En este tipo de asuntos, no diferenciamos entre Gobierno y oposición. Todos los partidos deben remar a una y ver lo que ha funcionado mal para que no se vuelva a repetir. Defendemos un código ético, con unas reglas muy claras en favor de la neutralidad y claridad en la gestión de la cosa pública. Que nosotros tengamos que ser leales con nuestros socios no quiere decir que debamos ser ciegos y mudos.

-¿Hubieran mantenido la misma postura si esto hubiera estallado a mitad de legislatura, lejos de las elecciones?

-Las investigaciones arrancaron en junio, cuando no se hablaba de elecciones. Y nuestra postura entonces ya era la misma.

-Apoyan los dictámenes críticos con la gestión pero respaldan a la consejera Azkarate. ¿No es contradictorio?

-No hay ningún voto particular pidiendo la dimisión de la consejera.
Nosotros apoyamos los dictámenes, simplemente.

 

-Pero apoyan a la consejera, ¿no?

-Es que nadie ha pedido en este momento su dimisión.

-El lunes -por hoy- el PP quiere plantear esa dimisión.

-No sé lo que va a suceder. Nosotros respaldamos el dictamen.

-¿Como Gobierno tripartito, las críticas a Azkarate no les salpican también a ustedes?

-No debería. La lealtad es hacia la sociedad. Compartir responsabilidades de gobierno no puede significar que tengamos que mirar hacia otro lado si una comisión determina que ha habido errores.

-No parece que les vaya bien con el PNV después de estos casos y de los encontronazos en cuestiones como la reforma de los modelos lingüísticos o la defensa de la consulta.

-Es algo normal entre partidos diferentes, con visiones distintas. Sobre los modelos lingüísticos, es muy difícil mantener la postura del PNV, cuando de lo que se trata es de fortalecer a la lengua más débil. Ha habido rifirrafes, pero en cuestiones concretas y como algo normal.

-Los conflictos sí han sido más numerosos en esta legislatura.

-Es algo circunstancial. Se han producido roces en cuanto a gestión y también en lo político, pero porque hay diferentes visiones. Por eso hemos decidido concurrir en solitario. Hemos visto una actitud en el PNV que no coincide con la de EA.

-¿La opción de reeditar el tripartito es prioritaria para ustedes?

-Eso dependerá de los resultados y de lo que opine la ciudadanía con sus votos. El tripartito ha sido una fórmula que ha funcionado bien.

-¿Piensan como hace medio año que Ibarretxe es un buen candidato?

-Es el candidato del PNV y entiendo que es el mejor candidato para ellos porque así lo han elegido.

-En los últimos tiempos, Ibarretxe ha tenido una mejor defensa en EA que en sectores del PNV.

-Igual es algo que tiene que mover a la reflexión dentro del PNV. Nosotros hemos trabajado a gusto con Ibarretxe una época y ahora estamos en una nueva fase. Ibarretxe no dirige la política del PNV sino Urkullu y José Luis Bilbao, que es quien dice que el tripartito está muerto.

-Ibarretxe y Madrazo son los candidatos más longevos. El resto de partidos en los últimos siete años ha afrontado procesos de renovación. ¿Faltan nuevos aires en PNV y EB?

-No me corresponde valorar eso. Nosotros hemos hecho nuestra labor de actualización de los principios. Otros partidos tienen que hacer sus reflexiones.

-¿Ve a Patxi López de lehendakari?

-No.

-¿Sin la menor duda?

-No le veo de lehendakari y, en todo caso, sería una mala noticia.

-¿Sólo puede serlo Ibarretxe?

-No. Hay otras posibilidades y fórmulas mejores. Ibarretxe lleva mucho
tiempo gestionando Euskadi y Patxi López no es un buen gestor.

-¿Teme que la polarización entre Ibarretxe y López les engulla a los demás?

-Parece que hay un intento de trasladar los esquemas de Estados Unidos y el Estado español a Euskadi. Pero aquí, por suerte, la riqueza política es mucho más amplia. La polarización no es entre PNV y PSE, porque ambos van a gobernar igual.

-¿Entre quiénes se da la polarización?

-Entre quienes quieren que las cosas sigan igual, como son PNV y PSE, y quienes creemos que ha llegado el momento de dar un salto cualitativo y que las cosas cambien. Llevamos 30 años metidos en una noria dando vueltas y vueltas.

-Siendo realistas no hay más que PNV y PSE como fuerza más votada.

-Hay 7 u 8 opciones a las que votar.

-Si los socialistas ganaran con más escaños, ¿EA podría apoyar un Gobierno de Patxi López?

-En el PSE se tiene que producir una evolución. Un partido que es incapaz de debatir en Euskadi sobre los modelos lingüísticos para que el euskera esté en igualdad de condiciones con el castellano, que es lo que establece la ley, o un partido que habla aquí de transversalidad y luego en Navarra hace que una bandera como la ikurriña no pueda ondear en los ayuntamientos no ofrece seriedad alguna.

-¿Pactarían con ellos si pudieran?

-Me parece complicado. Ojalá el PSE evolucione como en Cataluña.

-Descarta un Gobierno a la catalana.

-Lo veo complicado. El PSE no tiene nada que ver con el PSC. Los socialistas vascos están más cerca del PSOE de Castilla o el de Madrid.

-Complicado, ¿que no imposible?

-Hay que ver los resultados. Lo veo complicado. Y hablando de transformaciones políticas también me gustaría que el PNV dijera lo mismo que yo. Porque día tras día acuerdan con ellos en Madrid, apoyan los Presupuestos de Zapatero, la misma persona que ha echado por tierra el proyecto de ley de nuevo Estatuto, la ley de consulta… Esas son las
incoherencias que han generado una enorme abstención. Hubo 250.000 personas que en el año 2001 votaron a la coalición PNV-EA y que se han ido quedando en casa en sucesivas elecciones. Ése es el electorado al que pretendemos ilusionar. Con una propuesta política sin ambigüedades y en clave soberanista, democrática y pacifista.
Votantes de Batasuna

-¿Buscan el voto de Batasuna?

-Eso es insultar a la ciudadanía. Los votos no son de nadie. La sociedad vasca es suficientemente madura. Eso de decir que hay votos socialistas o populares es erróneo. Y, en segundo lugar, nosotros no hemos cambiado nuestro discurso, sino que hemos lanzado un mensaje claro para que los votantes sepan qué eligen. No puedes estar votando una cosa y la contraria. No se puede votar a un partido que es, a la vez, autonomista y soberanista e independentista.

-¿Pueden ‘pescar’ más entre los desencantados del PNV que entre los de la izquierda abertzale?

-No considero que haya votos fijos de ningún partido.

-Dicho de otra forma, ¿buscan a antiguos votantes del PNV?

-No del PNV, sino a gente que en 2001 votó a la coalición. Un 60% de los vascos son abertzales y un 30% independentistas. Queremos ser un polo de referencia para aquellos que se sienten soberanistas, independentistas y progresistas.

-Hablan ahora de un polo soberanista, ¿no es eso un guiño a la izquierda abertzale radical?

-Ése es un argumento artero que utilizan formaciones que interpretan todo en clave electoral, de quien dice que no se puede hablar ahora del caso Guggenheim o Balenciaga porque es en clave electoral.

-Y no es así.

-Los partidos estamos para trasladar un mensaje y plantear opciones de futuro. Nuestra propuesta pretende servir para articular algo que haga que este país se mueva realmente. El PNV no ha sido capaz de mover en clave política a Euskadi. Antes de que el Constitucional se pronunciara sobre la ley de consulta, Urkullu ya dijo que el PNV iba a acatar lo que dijera ese Tribunal.

-¿Le viene bien a EA que dirigentes como Rafa Díez Usabiaga aplaudan esa iniciativa?

-No hay que hacer esos análisis en clave de partido. Le viene bien a Euskadi. Estamos en una situación complicada como pueblo, tras treinta años de intentar que se nos reconozca y las fórmulas que ha promovido el PNV no son eficaces.

-¿Es un proyecto viable sin el PNV?

-Ese movimiento no se plantea contra nadie. La política vasca no gira en torno al PNV. Hay vida más allá. Si verdaderamente es un partido soberanista, el PNV tiene la posibilidad de sumarse.

-¿Cabe entonces una especie de Nafarroa Bai en Euskadi?

-En clave de movimiento soberanista me parece absolutamente necesario. No sé si a corto plazo podría ser posible, pero sí creo que sería imprescindible a medio plazo.

-¿Cómo llevan la confección de las listas?
Se apunta a que dirigentes históricos pueden caerse.

-Como en todos los sitios habrá renovación en algunos nombres y caras que seguirán.

-¿Azkarraga y Larreina seguirán?

-Probablemente, sí.

-¿La ilegalización de EHAK les beneficia?

-A quien beneficiará será al PSE. Serán Zapatero y Patxi López quienes
decidan en Madrid si se puede presentar la izquierda abertzale. Es lo que
pasó en las municipales y autonómicas de 2007. Y entonces ya había muertos
encima de la mesa. Ya se sabía que ANV no iba a condenar los atentados y
Zapatero permitió su presencia en algunos municipios. Por mero cálculo
electoral perverso.

-Ustedes criticaron que ANV no pudiera estar en todos los municipios.

-A Patxi López se le llena ahora la boca dando lecciones de ética, pero si
fuera él se me caería la cara de vergüenza. ¿Diego Armando Estacio y
Carlos Alonso Palate, asesinados en la T-4, son menos importantes que
Isaías Carrasco? Porque cuando se produjo aquel atentado de Barajas el
Gobierno socialista siguió negociando con ETA, ANV no condenó y no se
promovieron mociones de censura. ¿Y qué pasa? ¿que Raúl Centeno y Fernando
Trapero son menos importantes que Isaías Carrasco? Hubo que llegar al
asesinato de un ex edil socialista para que se plantearan las mociones de
censura. Me parece vergonzante esa actitud.

-Siguiendo esa línea, ¿por qué ahora sí puede prosperar la moción de
censura en Azpeitia por el asesinato de Inaxio Uria y no lo hizo en
Mondragón con Carrasco?

-Patxi López mintió al decir que EA ha tenido una actitud diferente en
Azpeitia y Mondragón. Eso es falso. En los dos casos dijimos que no íbamos
a ser obstáculo si se planteaba una moción de censura. En Mondragón fue la
incapacidad del PSE para obtener apoyos la que hizo que la moción
fracasara.
-Pero dice poco de los partidos el que se llegue a acuerdos en unos casos
y en otros no.

-Seguramente no es el ejemplo más edificante. Pero yo debo recalcar que
nosotros hemos tenido la misma actitud en uno y otro caso.

-¿En asesinatos como los de Carrasco y Uria no debería prevalecer un valor
ético respecto de quien no condena?

-Sí, sin duda.

-¿Por qué han decidido apoyar la moción de censura con uno de sus
concejales y no con los dos?

-Porque entendemos que es la manera de facilitar la moción. Con un voto
basta para que prospere. Si hubieran sido necesarios los dos votos los
hubiéramos dado. Es una postura consecuente con la decisión de no entrar
en el nuevo gobierno. Nosotros queríamos en Azpeitia otro tipo de gobierno
que ETA ha echado por tierra.

-¿Y no muestra cierta tibieza a la hora de censurar a ANV?

-De ninguna manera. Si no, no lo hubiéramos hecho. Esa interpretación no
la admito.

Lotura: Elkarrizketa El Correon
Jatorria: Antonio Santos/El Correo